Por: Mario J. Paredes
Director ejecutivo de SOMOS Community Care, una red de atención social de más de 2500 profesionales que cuidan a más de 1 millón de pacientes de Medicaid en la ciudad de Nueva York.
Con un enfoque particular en la concientización de cómo los factores sociales pueden afectar la salud e insistiendo en abordar los Determinantes Sociales de la Salud, el gobierno federal aprobó una nueva Exención 1115 de Medicaid para el Estado de Nueva York, poniendo a disposición $6 mil millones para mejorar de diversas maneras la calidad de la atención a los pacientes de Medicaid.
Oficialmente a partir de abril de 2024 y concluyendo el 31 de marzo de 2027, el nuevo programa de exención otorga una prima a la prestación de servicios de Necesidades Sociales Relacionadas con la Salud (HRSN, por sus siglas en inglés), a la que se le asigna casi la mitad del presupuesto.
La insistencia en tomar en cuenta los factores HRSN está en el centro de la visión de la exención de promover la equidad en la salud, reducir las disparidades y mejorar drásticamente la calidad de la atención médica financiada por Medicaid en todos los ámbitos, implementando mecanismos diseñados para operar a largo plazo en el sistema de Medicaid en el estado de Nueva York, incluyendo, especialmente, la inclusión oficial en Medicaid de un presupuesto para abordar problemáticas relacionadas con HRSN.
El programa proporcionará financiación que facilitará que los proveedores de atención primaria puedan involucrar a organizaciones comunitarias (CBO, por sus siglas en inglés) para encontrar soluciones a las necesidades sociales que están dañando la salud de la población.
Tendrá un enfoque regional que señalará áreas que históricamente han experimentado disparidades en la salud y desvinculación del sistema de atención médica.
La exención también exige la integración de la atención primaria, la salud conductual y la concientización sobre HRSN, particularmente en lo que respecta a los beneficiarios de Medicaid de alto riesgo, como los jóvenes, las mujeres embarazadas, las personas que luchan contra problemas de adicción y personas sin hogar por plazos extendidos.
La exención prevé que las Redes de Atención Social (SCN, por sus siglas en inglés) supervisen la programación de HRSN, trabajando con proveedores locales de atención social.
La exención también incluye más de $690 millones que se gastarán en la fuerza laboral de atención médica del estado de Nueva York con el fin de estabilizar esta fuerza laboral, brindar capacitación y educación, y mejorar el acceso a servicios culturalmente competentes.
La capacitación de la fuerza laboral, incluidos asistentes médicos, consejeros de salud mental y trabajadores de salud comunitarios, también incluirá la introducción de modelos de pago basado en el valor real, incluso cuando la exención exige un aumento en los pagos de honorarios por servicio.
Algunos médicos que se inscriban en un compromiso de varios años para trabajar con pacientes de Medicaid recibirán el reembolso del préstamo estudiantil.
Una Organización Regional de Equidad en Salud (HERO, por sus siglas en inglés) recopilará datos y los analizará con el fin de diseñar fórmulas para reducir las disparidades en salud, así como apoyar la prestación de servicios HRSN.
Esta entidad también explorará diferentes modelos de Atención Basada en el Valor Real que incluyan la cobertura de los servicios de HRSN.
SOMOS Community Care, una red de más de 2500 profesionales, la mayoría de ellos proveedores de atención primaria, que atiende a los pacientes de Medicaid en la ciudad de Nueva York, aplaude la nueva exención 1115.
Acoge con satisfacción el énfasis en la integración de los servicios de Necesidades Sociales Relacionadas con la Salud (HRSN) en la atención médica general como clave para superar las disparidades en la atención médica y crear equidad en la salud.
De hecho, SOMOS ha seguido este modelo de atención médica desde que comenzó en 2014 como una entidad exigida por la anterior Exención 1115. Tal como está, SOMOS se reconoce a sí mismo en el modelo de la nueva exención. Esto es cierto en varias áreas clave.
Gracias al trabajo de los trabajadores comunitarios de la salud que visitan los hogares de los pacientes, los médicos tienen información sobre las condiciones sociales que afectan la vida de los pacientes.
Los médicos de SOMOS ya han comenzado a comunicarse con las organizaciones comunitarias, tal y como exige la exención.
Pero se hace necesario disponer de financiación adicional para la formación de los trabajadores comunitarios de la salud y del personal médico, así como de otros puestos clave. La inversión en fuerza laboral de la Exención es muy crucial.
Y si bien se prevé que las Redes de Atención Social (SCN) organicen la programación de HRSN proporcionada por los proveedores locales de atención social, los pacientes que califican para dicha atención deben ser identificados primero por el médico de familia, pues quien mejor los conoce. También es concebible que consultorios médicos de SOMOS en el Bronx, Manhattan, Queens y Brooklyn formen sus propios mecanismos y redes para identificar y buscar ayuda para los pacientes que necesitan servicios HRSN.
Todo indica que los proveedores médicos deben, junto con los expertos en atención social, participar de alguna manera en las redes de atención social.
SOMOS también ha sido pionero en el modelo de pago basado en el valor real.
Su experiencia puede ser fructífera para los especialistas encargados de explorar estos modelos que serán clave en la rendición de cuentas a nivel estatal para mejorar la atención médica, el bienestar a largo plazo de los pacientes y la equidad en salud.
El objetivo fundamental de la exención es servir mejor a los pobres, los vulnerables y los más necesitados.
Los médicos de SOMOS viven y trabajan en la comunidad, sus consultorios son accesibles para sus pacientes, y en muchos casos comparten una identidad cultural con ellos, lo que es más propicio para una relación sólida entre médico y paciente, un vínculo que juega un papel importante en la calidad de la atención.
Los médicos de SOMOS han brindado una atención superior (médica, conductual y social) a sus pacientes, al tiempo que han ahorrado grandes sumas de dinero a los contribuyentes. Es más, SOMOS ha operado como la única red de proveedores independientes en el estado. No cuenta con el respaldo de un conglomerado hospitalario.
En su lugar, ha operado directamente en las trincheras. La nueva Exención 1115 promete un nuevo crecimiento, así como desafíos para SOMOS, y sus médicos y personal continuarán dándolo todo, como lo han hecho desde el comienzo de la reinvención de Medicaid.